Comenzamos preparando la gelatina. En un cazo ponemos 125 cl de agua, medio vaso. Esperamos hasta que comience a hervir. Añadiremos el sobre de gelatina. Removemos para que se disuelva bien. Ahora añadimos poco a poco un vaso de agua fría.
Tendremos preparado un recipiente para dejar reposar la mezcla alrededor de una hora. En este tiempo nuestra gelatina cuajará.
En un bol añadimos las fresas, el yogurt desnatado cremoso y las cucharaditas de edulcorante Stevia. Trituramos todo hasta lograr una mezcla homogénea y cremosa.
Ahora volvemos a la gelatina que ya tenemos cuajada. Con la batidora y las varillas batimos la gelatina, lo que añadirá moléculas de aire a la mezcla y veremos que crece en tamaño. En este momento solo tenemos que añadir la mezcla de las fresas y el yogurt que antes habíamos elaborado.
A la nevera 60 minutos. Si quieres aligerar el tiempo puedes tenerlo unos 20 en el congelador y 10 en la nevera.